Se equivoca Donha Concha. Lo sucedido puede describirse con datos y hechos. 1500 personas en el teatro (hoy hemos sabido que hubo gente que no pudo entrar), aplausos atronadores, todos en pie... Luego fuimos a tomar unos Don Q a un pub y al entrar un grupo de parroquianos se puso en pie y empez'o a aplaudirnos. En la bohemia de hoy en el Colegio de Abogados, no pocas personas era la tercera vez que ven'ian a vernos en tres d'ias seguidos. S'i, es Julia; es el mito; ser'a que se aplauden a s'i mismos; pero tambi'en que los temas son buen'isimos, que las chicas est'an cantando y recitando de maravilla, y que Chuchi se est'a disfrutando las percus en cualquier situaci'on...
Hoy hemos tenido un concierto dif'icil, por las condiciones de sonido y de la sala: llenazo espectacular, pues se va corriendo la voz, de gente bullanguera y movidilla. Y de nuevo la ovaci'on agradecida, los parabienes, los elogios. Seguimos en la nube, a pesar del cansancio: cuatro conciertos en tres d'ias, cada uno con sus respectivos nervios, y hoy una agotadora, interminable sesi'on de grabaci'on televisiva.
Pero sarna con gusto da gusto. Manhana libramos. Nos vamos de excursi'on. El R'io Grande, Pinhones, Luquillo, El Yunque... Luego una bohemia para ver recitar a una senhora nonag'esima companhera de Silvia Rexach, y, para acabar, fiestorro en casa de Consuelo. Si sobrevivimos, seguiremos informando.
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Por supuesto, quise decir "nonagenaria". Bueno, al menos fuera del escenario. En cuanto entra en 'el, con la guitarra y una m'aquina de esas de ahora, se transforma. Impresionante. La malaguenha final de Silvia Rexach fue apote'osica. Supongo que Concha Gonz'alez le dedidar'a m'as de una l'inea.
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