Os dejo aquí una foto en la que muestra su faceta de pilluelo triscador y licencioso, rodeado de nuestras tres grandes damas y de nuestro arreglista de guardia... Va por ti, Robertinho...
lunes, 9 de febrero de 2009
NO ESTAMOS TODOS. NOS FALTA R2 D2
Pues sí, ya sabéis: no hay felicidad completa. Y en este caso resulta bastante incompleta, la verdad, porque en la expedición va a faltar un puntal fundamental de "A Julia sin lágrimas": El gran Roberto Ripio, el hombre de la exquisita sensibilidad, lo más parecido a un humanista italiano que puede parir el siglo XXI, no vendrá con nosotros en este viaje, por motivos personales, y, con él, nos faltará su voz inigualable, cálida y serena, sus coros siempre en su sitio, su versión "ilustrada" de la grifa negra, su siempre iluminante compañía... Hemos hecho lo que hemos podido para suplir tan sensible baja: ajustar coros y percusiones, una versión más barriobajera de la grifa, intentar imitarle en su inimitable recitado de Mir... Lo tendremos presente en todos nuestros conciertos, y a él irá dedicado cada uno de ellos.
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Sí, desde luego que se echa de menos a Roberto... Sobre todo, que me obliga a tener voz para cantar, yo que pensaba dilapidar la poca que me queda en largas noches de farra y ron!
ResponderEliminarEl Pereles
Pedro, no necesitas ahorro alguno para volar a la debida altura. He estado oyendo "El mundo que yo no viva" varias veces últimamente.
ResponderEliminarCopón... O sea. Para prescindir de las delicias caribeñas mejor se queda uno en casa (sic.) :-)
Juan, muchas gracias por el recuerdo. Yo os iré imaginando (ya empecé, en realidad).
Abrazos a toda la tropa troupe,
Roberto